Y qué si dicen que no te convengo.
Y qué si dicen que entre tus defectos, debes contarme a mi la primera.
¿Y qué?
Y qué si no les interesa hablar de que la primera sonrisa de cada mañana es para ti y que no me duermo sin dedicarte un gemido nuevo cada noche.
¿Y qué? Que te quiero, te quiero aquí.
Pues eso, ¿y qué?
ResponderEliminarPrecioso. Gemidos SIEMPRE antes de dormir.
Por aquí me quedo.
Besos.
Gracias y que no nos falten nunca, los gemidos.
EliminarPor aquí seguiré, seguro.
Besos.
¿Y qué más da lo que diga la gente si te hace feliz?
ResponderEliminarMuy bonito.
Te seguiré leyendo.
¡Muchas gracias!
EliminarNos leemos.